Curriculum Vitae
Se graduó como Geólogo en la Universidad Nacional de Córdoba, es Máster en Ciencias y especialista en recursos minerales nucleares.
Es experto en recursos nucleares del Organismo Internacional de Energía Atómica (IAEA), habiendo prestado asesoramiento y capacitación a instituciones gubernamentales numerosos países de sudamérica.
Es Docente del Instituto de Tecnología Nuclear “Dan Beninson” y de la Licenciatura en Ciencias Ambientales de la Universidad de Buenos Aires, y Autor de numerosos trabajos sobre recursos de minerales energéticos, presentados en ámbitos nacionales e internacionales.
Es Miembro del Grupo de Expertos para la Clasificación de Recursos de la Comisión Económica de las Naciones Unidas para Europa y Miembro del Grupo del Uranio de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico - Agencia de Energía Nuclear y del Organismo Internacional de Energía Atómica.
Actualmente presta servicios en la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA) habiéndose desempeñado como Gerente de Exploración de Materias Primas y Director del Comité de Materias Primas Nucleares de la Asociación Argentina de Tecnología Nuclear (AATN).
Resumen
En materia de minerales nucleares, en la Argentina, la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA) informó la existencia de aproximadamente 20.000 tU como recursos identificados, para costos de producción < USD 130 /kgU. A este valor se adicionan los recursos reportados por compañías mineras que cuentan con la certificación NI 43-101, alcanzándose una cifra de más de 31.000 tU. Desde el punto de vista geológico, estos recursos se encuentran en depósitos de tipo arenisca, volcánico y superficial.
En lo que hace a recursos no descubiertos, de acuerdo con el actual conocimiento geológico y metalogénico de las principales unidades de investigación de favorabilidad uranífera del territorio nacional, están evaluados en 80.000 tU.
En cuanto a minería extractiva, la Argentina alcanzó una producción histórica de 2600 tU, utilizando minería a cielo abierto y subterránea. En 1992, debido a los bajos precios en el mercado internacional, se comenzó la importación de concentrados de uranio, situación que paulatinamente llevó al cierre de la producción local en 1997. Es decir que, en la actualidad, no hay producción de uranio en el país, por lo que las necesidades de aproximadamente 250 tU/año para la fabricación de combustible de las tres centrales nucleares en operación se cubren con materias primas provenientes del exterior (Canadá, Kazajstán y República Checa).
Respecto del Th en la Argentina, al igual que lo que acontece a la escala mundial, este metal no ha sido objeto de estudios sistemáticos, y la mayoría de los depósitos y manifestaciones existentes fueron descubiertos como resultado de la exploración de uranio. Se han encontrado los siguientes tipos geológicos de depósitos: placeres, carbonatitas y pegmatitas.
En las décadas de 1950 y 1980, la CNEA abordó algunos estudios de reconocimiento específicos para Th que definieron recursos muy limitados, pero los proyectos relacionados no fueron continuados. Actualmente, dado el renovado interés en ETR, varias empresas junior han puesto en marcha diferentes proyectos de exploración, los que exhiben alentadoras perspectivas geológicas, pero no cuentan con un grado de conocimiento avanzado de los recursos de Th asociados.
A nivel producción, solo puede mencionarse que, entre 1954 y 1956, se extrajeron de 1010 kg de concentrado mineral de monacita, pero sin efectuar la recuperación del Th presente.
En cuanto al ciclo del combustible en el país, no existen perspectivas del uso del Th como materia prima. Sin embargo, podría señalarse que las tres centrales nucleares existentes, con reactores de agua pesada, podrían ofrecer capacidades para irradiaciones a gran escala de Th-Natural (fértil) para producir U-233 (físil), para lo cual se requieren evaluaciones detalladas con el fin de obtener condiciones de irradiación seguras, junto con los eventuales cambios operacionales.
